Pittsburgh.- En lugar de ser dejado en libertad para probar suerte en la agencia libre de la NFL, el defensivo profundo de los Steelers de Pittsburgh, Troy Polamalu, decidió retirarse antes de iniciar la temporada 2015.
“Nunca he considerado seriamente jugar para otro equipo. Tan sólo se trataba de si yo quería jugar o no. Platiqué con muchas personas para que me dieran un consejo de lo que debería hacer con mi situación, y lo que me decían como argumento, y que para mí no era suficiente es: ‘Troy, tú jugaste 12 años en la NFL, ganaste Super Bowls, ganaste reconocimientos individuales. Ya no tienes nada qué probar. Ya tienes un legado’.
“Y yo tan sólo les decía: ‘Antes que nada, a mí no me importa nada de un legado. En segundo lugar, yo juego este deporte porque lo disfruto’. Ese es el motivo por el que seguía jugando”, comentó Polamalu, quien disputó 158 partidos con los Steelers, en los que acumuló 32 intercepciones para 398 yardas y tres touchdowns.
“Lo que me hizo desistir definitivamente fue la familia. Si estoy en mi cuarto año, en el quinto, incluso si estuviera en mi décimo año y si estuviera en Alaska. Pero cuando inicié este proceso y dudé en continuar o ya retirarme, fue como la señal que me hizo decir: ‘¡Whoa! Si ya incluso estás dudando de jugar o no, lo mejor es que dejes de hacerlo definitivamente’, porque si algo sé de este deporte es que requiere de mucho, mucho compromiso como para tan sólo ser un jugador promedio más”, opinó Polamalu, quien se comunicó personalmente con el dueño del equipo, Dan Rooney, para informarle de su irrevocable decisión.
Polamalu, quien representaría un golpe de 8.25 millones de dólares al tope salarial de los Steelers para esta campaña, fue la selección 16 global del Draft 2003 de la NFL, luego de egresar de los Trojans de la USC.
Troy se convirtió en titular en su segunda campaña con Pittsburgh, fue elegido ocho veces al Pro Bowl y fue parte esencial de los triunfos en los Super Bowls XL y XLIII.