Con gol agónico, los Gallos Blancos pudieron cantar en el Estadio Corregidora y bajaron de su nube al líder América para mantener vivas sus aspiraciones de entrar a la Liguilla. Las Águilas llegarán desmoralizadas al Clásico Nacional frente a Chivas la próxima semana a pesar de que con la derrota mantienen el liderato general.
El visitante dejó las especulaciones en el vestidor y respetando su condición de superlíder tuvo el dominio del esférico y la primera oportunidad de peligro de la noche con un cabezazo de Paolo Goltz que se estrelló en el poste izquierdo del guardameta Édgar Hernández.
Los Gallos apostaron al contragolpe apegándose siempre a un orden defensivo en su retaguardia. Sanvezzo y Ronaldinho estuvieron atentos de cualquier oportunidad al frente en busca de matar al rival.
Fue a través de una descolgada y un pase a profundidad que Querétaro se pudo adelantar en el marcador a pesar de haber tenido hasta ese momento poco el esférico. Sanvezzo fue habilitado por derecha y al entrar al área no dudó en sacar de su botín un misil imposible para Muñoz.
El gol desconcertó al conjunto americanista y jugadores como Jesús Molina y Paolo Goltz vieron la tarjeta amarilla víctimas de la desesperación. La balanza en pocos segundos se puso a favor de los locales y Ronaldinho estuvo cerca del segundo con un tiro de media distancia que obligó al guardameta azulcrema a emplearse a fondo con un gran lance.
Antes de que concluyera la primera mitad, la escuadra de Ignacio Ambriz logró ampliar su ventaja producto de otro contragolpe. William da Silva recibió pase en el área y no perdonó al oponente con definición perfecta.
Los de Coapa estaban sorprendidos y parecía que el cansancio de tres juegos en una semana les estaba cobrando factura.
Mohamed mandó al campo a Luis Ángel Mendoza en la reanudación y tras la expulsión de Ricardo Osorio por doble amarilla también ingresó a Michael Arroyo en busca de la remontada.
Querétaro cedió definitivamente la iniciativa al tener un hombre menos y en un error defensivo las Águilas recortaron distancias en el marcador con un disparo bombeado de Oribe Peralta que no pudo detener el arquero rival a pesar de un manotazo. El Cepillo reactivó su romance con el gol y marcó por tercer encuentro consecutivo.
Lanzados totalmente al frente, los azulcremas encontraron el empate por medio de un desborde de Michael Arroyo por izquierda y una definición a bocajarro dentro del área de Mendoza que desencajó el éxtasis de su afición.
Cuando el olor a empate persistía ya en el Estadio Corregidora los Gallos Blancos aprovecharon un descuido para llevarse el triunfo en tiempo de compensación. En jugada de riñones, Sanvezzo superó su marca y logró el tercer tanto de su equipo que lo coloca como líder de goleo individual. El gallo cantó y desplumó a su contrario.
Con este resultado, el cuadro dirigido local sumó 18 puntos y se coló al séptimo peldaño de la clasificación, mientras que América se quedó en la cima con 29 unidades.