Ciudad Victoria, Tamaulipas.- Esta mañana Correcaminos realizó un entrenamiento ligero, previo a su viaje a Guadalajara por la tarde, en donde mostraron buen ánimo de cara al enfrentamiento final del Clausura 2014.
El delantero Roberto Nurse, charló con los medios de comunicación que se hicieron presentes, asegurando que Correcaminos no ha ganado nada y simplemente siguen con la mentalidad bien puesta en el objetivo, el ascenso.
“Estamos contentos por conseguir llegar a estas instancias, no hemos conseguido nada, tenemos la mentalidad bien puesta en lo que nos fijamos desde el principio del torneo, que es el ascenso, y el paso a seguir es el campeonato en este torneo. Lo que nos compete ahorita es ganarle a Tecos y para seguir cumpliendo nuestros objetivos, sin olvidar el objetivo principal”, señaló.
Dijo que los universitarios buscarán no sufrir como lo hicieron en el encuentro de ida ante Alebrijes, y para eso intentarán hacer un juego perfecto.
“Tenemos que estar mentalizados desde el primer segundo del primer partido, no podemos regalar ningún momento, ninguna pelota, nada, porque sufrimos mucho, y uno se desgasta más sufriendo, tenemos que hacer un juego perfecto desde el principio para no estar sufriendo”, expresó.
Menciona que el resultado en el torneo regular quedó atrás y buscarán el campeonato que merecen.
“La liguilla es otra historia, lo que paso en el torneo está en el pasado, y es un rival de respeto, por algo está en la final, pero yo tengo la convicción que vamos a ir a buscar la victoria y con todo respeto para el rival pero, nosotros merecemos ser campeones y lo vamos a ser”, declaró.
Aseguró que buscarán tranquilidad sacando ventaja en la ida, “para mí sería muchísimo mejor poderles ganar por más goles (que el 2-1 en el torneo regular) y estar un poco más tranquilos, pero sabemos que cada cosa tiene su proceso, así que vamos a trabajar para ello”, sentenció.
Manifestó su agradecimiento a la gente por el peso que hizo sentir en el estadio.
“Desde antes de empezar el partido había muy buena vibra, la gente estaba apoyando, cuando empezaron a caer los goles la gente se metió, y también ellos hicieron su partido porque eso influyó bastante en el rival, se sentía a la gente gritando y cantando, cuando se escuchó el silbatazo final pues una alegría de todos, de ellos y nosotros”, agregó, “pesó en todos los sentidos y ahora la final no tiene que haber una diferencia”, concluyó.