Acompañar al Tricolor en sus partidos del Mundial Brasil 2014 implicará desembolsar una buena cantidad de dinero. En promedio, 18 mil dólares.

Un par de agencias de viaje mexicanas ofrecen paquetes oficiales para asistir al máximo evento futbolístico. Con Mundomex, los costos oscilan entre 10 mil y 30 mil billetes verdes; Nevada Tours tiene opciones que van de los 8 mil a los 19 mil dólares. En cualquier caso, cifras mayores a lo invertido por los aficionados entre Francia 1998 y Sudáfrica 2010.

“Desafortunademente, no puede ir gente que no tenga dinero”, lamenta Héctor Ruiz Velasco, presidente de Nevada Tours, entrevistado vía telefónica. “Este Mundial, como el de Sudáfrica, y como van a ser todos de aquí en adelante… Y de Rusia, ni le digo, porque son de los lugares más caros en hoteles, aunque puede ser mejor por el tema de los transportes”.

La frágil infraestructura hotelera y de transporte, además de las enormes distancias entre las sedes, elevan los costos. Rafael Nosti, miembro de cuentas clave de Mundomex, reconoce que ir a Brasil será “muy caro y los boletos para el Mundial cada vez lo son más, así es que hay que saber que se debe hacer el gasto, pero van a tener una gran experiencia”.

El paquete más barato ofrecido por esa agencia es de 10 mil dólares. Incluye un juego de la Selección Mexicana y otro de distintos equipos, con cinco noches de crucero, recurso utilizado ante la falta de buenos lugares para dormir.

Si se desea asistir a un juego de cuartos de final, las dos semifinales y el duelo por el título mundial, el costo es de 30 mil dólares. “Hace algunos años, y por la experiencia que tiene la oficina con negocios en Brasil, sabíamos de la carencia que tiene el país en oferta hotelera, sobre todo en cuanto a calidad y precio: hoteles malos y muy caros”, revela Nosti. “Somos agencia oficial desde 1986 y sabemos las exigencias que tienen los mexicanos en los Mundiales, sobre todo por la gente que paga tanto dinero y, normalmente, busca que se le repercuta con un buen servicio”.

Nevada Tours apostó por reservar habitaciones en Río de Janeiro, una de las pocas ciudades preparadas para el reto, de donde trasladará a sus clientes a Natal, Fortaleza y Recife, sitios en los que los elegidos por Miguel Herrera jugarán sus encuentros de la fase grupal. Irán y volverán el mismo día.

“No se puede manejar de otra manera por el tema de los hoteles”, asegura Ruiz Velasco. “Si los dejo cinco noches en Natal, no tienen qué hacer… Ni siquiera partidos. Ni en Recife, Natal o Fortaleza hay juegos buenos. Por eso, tomamos la decisión”. Su paquete más sencillo, con un juego del Tricolor, es de 8 mil. Ir a las semifinales y la gran final costará casi 24 mil dólares.

Entre ambas agencias calculan llevar a unos 20 mil aficionados, pese a los elevados costos en esta Copa del Mundo.