Jugarse un Mundial en 90 minutos o menos, les parece excesivo. La buena noticia es que a Miguel Herrera, también.
Los ‘legionarios europeos’ del Tricolor apelan a su hoja curricular ante la falta de tiempo. Esta noche frente a Nigeria, será la única ocasión que El Piojo les evalúe como seleccionados, antes de la elaboración de la nómina mundialista. No habrá otra fecha FIFA.
A diferencia de quienes militan en clubes mexicanos, esos que han sido base en el equipo de Herrera, para ellos no existe mañana.
Eso explica su discurso… Y el del entrenador nacional, quien colocará de inicio prácticamente a todos. El único que podría arrancar en la banca es Javier Aquino, si la almohada sugiere al estratega que es mejor colocar a Juan Carlos Medina en la zona de volantes, pero Guillermo Ochoa, Diego Reyes, Héctor Moreno, Andrés Guardado, Héctor Herrera y Javier Hernández, escucharán el primer silbatazo esta noche sobre la cancha del Georgiadome.
Rigurosa prueba ante la mirada de Herrera, mas no lo único que contará en el momento de elegir a los 23 hombres que le acompañarán en la aventura llamada: “Brasil 2014”.
“No nos jugamos todo aquí, porque todavía faltan 100 días para el Mundial”, recuerda Moreno, quien acompañará a Reyes y a Rafael Márquez en la defensa central. “Obviamente, es el único parámetro que tiene Miguel para vernos en persona, pero después tendremos lo que nos quede de Liga para demostrar, seguir trabajando y llegar en buen ritmo”.
“Todos sabemos bien lo que significa venir. Si es nuestra única oportunidad de fecha FIFA, pues hay que mostrar el nivel”, se resigna Aquino. “Tampoco en un partido se puede calificar la calidad de un jugador, porque puede ser de circunstancias, una noche buena o mala. [Debemos] hacer nuestro trabajo, mostrar buen nivel y en el club reafirmarlo, porque donde nos está observando Miguel es allá”.
El nerviosismo de algunos es reflejado con el sudor de manos, pero el carismático director técnico se esmera en otorgarles calma al adelantar que la evaluación se mantendrá, más allá de lo que suceda frente a las Águilas Verdes esta noche en Atlanta.
“De entrada, les dije que este partido no calificaba a alguien. Es para ver cómo se posicionan en mi idea, el funcionamiento del equipo, como me gusta que se paren en el campo”, aclara. “El resultado no va a ser determinante para la calificación y, también, un jugador puede pasar por un mal día, lo cual no quiere decir que sea mal futbolista”.
“Por algo están en Europa. Es el momento de hacer las cosas como saben. Si se equivocan, tampoco ya están crucificados; al contrario, también es importante saber que puedes errar, pero [debe aparecer] la fortaleza de levantar la cabeza y estar preparado para la siguiente jugada”.
Tal como lo han hecho durante buena parte de sus trayectorias, esas que les permiten asegurar que no todo estará en juego dentro de un coloso que vive sus últimos meses.
“Demostrar, sí, que estamos en buen nivel, pero no por un partido vas a demostrar quién es Andrés Guardado”, sentencia el defensa del Bayer Leverkusen. “No me considero un novato como para ahora venir a enseñar lo que ya he hecho en toda mi carrera”.
“No quiero parecer arrogante ni mucho menos, pero siempre hay una carrera que respalda y ahora sí [tenemos que] demostrar de primera mano que estamos preparados, queremos estar ahí en el Mundial, pero en el futbol –hoy en día— todos saben quién es Andrés Guardado”.
Reconocimiento que, presume, se ha ganado en la cancha, durante su aventura por el viejo continente. El Chicharito está de acuerdo y subraya que ir a “Europa es más un crecimiento que un retroceso”.
Por lo que se niegan a jugarse su resto en 90 minutos o menos. Afortunadamente para ellos, El Piojo luce en la misma sintonía, lo que los motiva para un Mundial, que cada vez está más cerca.