La selección española certificó su pase al Mundial de Brasil 2014, con un triunfo cómodo frente a una débil Selección de Georgia que acusó sus numerosas bajas.
España necesitaba una buena actuación para cerrar la clasificación al próximo Mundial, y logró su objetivo.
Tras salir descontento del triunfo en Son Moix ante Bielorrusia, Del Bosque se olvidó de los roles y apostó por soluciones. Juanfran y un descarado Alberto Moreno se instalaron en campo del rival, doblaron a los extremos y pusieron centros continuamente.
España fue un vendaval ante el que una Georgia plagada de bajas, sólo pudo intentar protegerse, y en unos pocos minutos, creó más ocasiones que en todo el encuentro de Mallorca.
Pese a que la defensa de cinco suele dejar con pocas opciones al nueve, Álvaro Negredo sobresalió del muro georgiano. Hizo trabajar a Loria, primero en un rechace a disparo de Pedro, posteriormente con una chilena espectacular desde la frontal del área que sacó con una buena estirada el portero georgiano, y al final encontró el premio del gol, tras una combinación de Pedro e Iniesta, fusilando al guardameta.
Era un día especial para Iniesta, ya que ante sus paisanos debutó con la Roja, y hoy selló una clasificación al Mundial. El Manchego buscó el gol sin éxito con dos remates que no encontraron portería.
Casillas evitó el empate en la única llegada con peligro de Georgia. Sergio Ramos se confió y cuando reaccionó le habían superado en velocidad en una de esas pocas opciones de las que dispuso el conjunto Georgiano.
La sociedad Juanfran-Navas funcionaba. Era un surtidor de fútbol ofensivo. Otro centro de Navas lo estrelló Negredo en el poste, con todo a su favor para marcar. De la misma manera arrancó la segunda parte con una España volcada al frente.
Juan Mata en el 60 puso las cifras definitivas a un marcador que resultó en poco pese al abrumador dominio español.