Danny ‘Swift’ García se consolidó como el mejor en la división de los Superligeros al defender con éxito por cuarta ocasión el campeonato del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) y por tercera el cetro de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), ante un rival de mucho respeto como Lucas Matthysse.
Los jueces dieron la victoria al estadounidense con calificaciones de 115-111, 114-112 y 114-112, en un combate que comenzó complicado para el campeón, quien aguantó las envestidas de su oponente que en las apuestas era favorito 2-1.
El inicio de la batalla fue de estudio, García se mantuvo a la distancia para evitar ser alcanzado por los misiles del argentino que salió a presionar por todos los rincones del ring.
Fue una pelea de dos tiempos. La primera mitad fue para el sudamericano, quien en repetidas ocasiones logró meter sus combinaciones a la cabeza con ambas manos y logró poner mal al nacido en Filadelfia.
La segunda parte la dominó García, mostrando velocidad y buen juego de piernas y cintura; logró quitarse diversas combinaciones de encima y lo más importante fue que descifró la cerrada guardia del Matthysse, quien nunca bajó los guantes sabedor de la peligrosidad del argentino.
El séptimo fue decisivo para la contienda, pues el ‘Swift’ García metió una poderosa izquierda que le provocó una importante inflamación en el ojo a Lucas, que tuvo que enfrentar el resto de la contienda mermado físicamente.
“Es un buen campeón y le agradezco por darme la oportunidad, me agarró un buen golpe en el ojo, pero dimos una buena pelea. Lo del ojo no es pretexto, él es un peleador de respeto y estoy orgulloso de lo que dije”, dijo Matthysse tras la pelea.
El último capítulo fue de alarido, ambos cerraron a tambor batiente, sin contemplaciones, exponiéndose a caer noqueados, todo con tal de quedarse con la victoria.
“Él es un guerrero, me enfoqué en tirar combinaciones yen cuidarme de su pegada, lo hice con el corazón”, dijo el campeón mundial.