Cansado de los amargos recuerdos futbolísticos del Tri en lo que va de 2013, Ramón Ramírez prefiere quedarse sin memoria.
“Mira, yo quisiera en este momento evitarme las ganas de hablar del pasado”, asegura el ex futbolista. “Ahorita quisiera pensar positivo y únicamente enfocarme en los próximos dos partidos que tienen, que es contra Honduras y Estados Unidos”, añade el otrora símbolo de la Selección Nacional.
“Tengo la plena confianza de que este equipo, por su carácter, su personalidad, por su misma esencia y el orgullo mexicano, va a salir adelante. Espero que se consiga una victoria contra Honduras, bien ganada, a pulso, que sea por buen futbol, por convencimiento y creo que en Estados Unidos no perdemos”, imagina Ramírez.
“Lo pasado, ya habrá tiempo de analizarlo y revisarlo y de ver qué cosas se pueden mejorar, porque siempre hay detalles a pulir, pero ni siquiera me desgasto en pensar si Chepo, si los jugadores, si el que vino, si el que no vino. Ahorita, el grupo debería estar enfocado en ganar el viernes y también irle a ganar a Estados Unidos”.
Bajo su óptica, México no ha alcanzado su mejor nivel futbolístico, pero también ha venido, de la mano, un crecimiento futbolístico de otras selecciones del área, como Estados Unidos, Costa Rica y Panamá. Por eso respalda también el proyecto del Chepo: “Si ya supo hacer jugar a este equipo a buen nivel, puede volverlo a hacer”, mientras reparte la responsabilidad a los jugadores.
Eso sí, Ramón evita señalar quién es el indicado para ocupar el ataque del Tri, si Oribe Peralta o Javier Hernández. “Considero que Oribe ahorita es el jugador más regular en el futbol mexicano, pero no podemos tampoco quitarle méritos a lo que es El Chicharito. A quien El Chepo elija, que sepa que realmente el compromiso es con la Selección y con el país de sacar un triunfo y de no poner en riesgo una posible clasificación al Mundial”.
Ramón tampoco se hace bolas con los naturalizados: “Ese es un tema muy delicado, por un lado ellos hacen uso del derecho, como cualquiera, y son tan mexicanos como nosotros. Ahora, si ya están ahí, simplemente tienen que demostrar por qué los convocaron”.
En la entrevista exclusiva con EL UNIVERSAL, también habla de sus amadas Chivas, a las que hoy ve en crisis porque “han brincado de proyecto en proyecto y no se han casado todavía con uno”, reprocha, sin culpar al dueño Jorge Vergara.
Ramírez fue invitado por el Santos Laguna, club que lo vio nacer, para festejar los 30 años de historia del club: “Para nosotros es muy agradable volver a ver a compañeros con los que viviste muchas experiencias. Más que un partido de futbol va a ser una convivencia”.