Cristiano vuelve a Mallorca con el gol en la cabeza. En Palma vivirá sensaciones encontradas. Con Pellegrini hace dos temporadas firmó el primero de sus hat-tricks, a los que se ha aficionado desde que viste de blanco. En cambio, el año pasado, además de no marcar, se marchó lesionado tras una entrada de Pau Cendrós que le tuvo de baja cerca de dos semanas. Hoy sólo le importa ganar.
El Madrid no está en Palma de vacaciones, ni mucho menos. Mourinho se ha cansado de resaltar la importancia capital de este partido por encima del doble Clásico que asoma a la vuelta de la esquina. El luso ha priorizado la Liga antes que la Copa. Así que los blancos sólo piensan en el bermellón del Mallorca. Además, un triunfo vale el campeonato de invierno. Quedaría una jornada para la primera vuelta y el Barcelona no les podría alcanzar.
El cuadro madridista ve por el retrovisor al Barça a cinco puntos de distancia, una renta que no puede reducirse bajo ningún concepto. Se impone por tanto otro triunfo del Mou Team. Para lo cual Mourinho saldrá con todo, haciendo de sus palabras hechos. El luso no olvida que en su visita del curso pasado el Madrid no se llevó más que un empate sin goles, un botín escasísimo.
La única duda que puede tener es la de jugar de inicio con Higuaín y Benzema. El francés ha estado entre algodones tras su golpe en la tibia contra el Granada. O hay doble 9 o Callejón recuperará su sitio en la banda derecha, aprovechando la ausencia de Di María, que ya toca a su fin. No viajaron ni el argentino, que ya está recuperado pero que Mou quiere reservar, ni Altintop, con una cervicalgia, ni Khedira ni Carvalho, que continúa ausente.
Los demás serán los de gala. Arbeloa, tras el enfado de Mou por su expulsión en Málaga, ocupará el carril diestro, acompañando a Pepe, Ramos y Marcelo. El doble pivote será el preferido por Mou, Lass-Xabi. Özil seguirá en la media punta y tirado a la izquierda aparecerá Cristiano Ronaldo, que a falta de reconciliarse con el Bernabéu -no se verán hasta el próximo miércoles-, quiere seguir hinchando su cuenta de goles. A Cristiano nunca se le llena la barriga de tantos. Siempre hay hueco para uno más.
El Mallorca de Caparrós recibirá al líder en plena efervescencia por su remontada y pase a los cuartos de final contra la Real Sociedad. El conjunto balear ha recuperado el pulso tras la llegada del utrerano. En Liga, de 11 partidos, sólo ha ganado dos, pero ha empatado seis, mientras que ha perdido tres.