La selección brasileña practicó los penaltis en la víspera del partido de semifinales de la Copa Confederaciones contra Uruguay.
El equipo brasileño realizó varias tandas de lanzamientos desde el punto de los once metros, en las que participaron tanto los titulares como los suplentes, durante el entrenamiento de una hora, realizado en el estadio Mineirão de Belo Horizonte.
Si el partido de mañana termina empatado tras el tiempo reglamentario y en la prórroga de 30 minutos, el finalista se decidirá en la tanda de penaltis.
Además, la selección ejercitó las faltas e hizo un partidillo en un campo reducido, en el que fueron titulares Julio César; Daniel Alves, David Luiz, Thiago Silva, Marcelo; Luiz Gustavo, Paulinho, Oscar; Hulk, Neymar y Fred.
El seleccionador brasileño, Luiz Felipe Scolari, anunció en una rueda de prensa que utilizará este once, el mismo de los dos primeros partidos de la primera fase y que sólo alteró contra Italia por una lesión leve de Paulinho, ya recuperado.