El Chelsea rentabilizó el tropiezo del Tottenham en White Hart Lane ante el Everton (2-2) y le arrebató de la tercera plaza de la Premier League, pendiente del duelo de Manchester, entre el United y el City, que el lunes completará la trigésima segunda jornada.
El conjunto de Rafael Benítez pone sus cosas en orden. Semifinalista de la Copa de Inglaterra y cerca de superar los cuartos de final de la Europa League, encuentra el sosiego también en la Premier.
Sufrió ante el conjunto del italiano Paolo Di Canio, que se puso por delante gracias a una acción de fortuna que acabó con el tanto en propia puerta del español César Azpilicueta al borde del descanso.
El equipo londinense se encontró con una situación similar en la reanudación. Matthew Kilgallon introdujo el balón en su portería y el partido se igualó.
A partir de ese momento el Chelsea, al ritmo impuesto por Juan Mata, subrayó su superioridad. Una acción del brasileño David Luiz que finalizó el serbio Branislav Ivanovic redondeó la remontada, que situó al Chelsea tercero.
El equipo de Benítez aprovechó el tropiezo del Tottenham, que padeció un partido angustioso.
Víctima de la presión, el equipo de Andre Villas Boas, sin su líder, el galés Gareth Bale, lesionado, sólo logró un punto ante el Everton (2-2), que también suspira por un puesto europeo.