El Tribunal de Primera Instancia de París anuló este lunes el embargo cautelar por 55 millonesde euros que Kylian Mbappé había conseguido sobre las cuentas del Paris Saint-Germain. El embargo había sido solicitado por el jugador como parte de una demanda por supuestos impagos de salarios y primas relacionados con su última temporada en el club francés.
Mbappé, ganador de la bota de oro en su primera temporada con el Real Madrid,mantiene un enfrentamiento legal con su antiguo club desde hace varios meses. El conflicto se originó cuando el futbolista exigió el pago de una suma millonaria correspondiente a acuerdos económicos no cumplidos. El caso fue llevado inicialmente al comité disciplinario de la Liga de Fútbol Profesional (LFP), que falló a favor del jugador el 25 de octubre de 2024. Sin embargo, el PSG se negó a cumplir el dictamen y anunció que recurriría a la justicia ordinaria.
El objetivo de Mbappé era asegurar el pago inmediato mediante medidas cautelares, como el embargo que ahora ha sido revocado por el tribunal parisino. La decisión representa una victoria parcial para el PSG, aunque la disputa legal aún sigue en el aire.
Desde el PSG sostienen que existió un acuerdo verbal entre Mbappé y el presidente Nasser Al Khelaifi, en el cual el jugador se comprometía a renunciar al monto reclamado si finalmente no renovaba su contrato en 2024. No obstante, el entorno del futbolista alega que, al no existir ningún documento firmado, dicho acuerdo carece de validez legal. Esta discrepancia será clave en el desarrollo del caso, que ahora se encamina hacia una instancia más prolongada.
El conflicto, lejos de resolverse, podría terminar en el Consejo de Prud’Hommes, el equivalente francés al juzgado laboral. De llegar a esa instancia, el proceso podría extenderse durante meses o incluso años, manteniendo viva una disputa que ha trascendido lo deportivo y que podría tener implicaciones financieras y legales de gran magnitud para ambas partes.