La final de la Copa América celebrada en el Hard Rock Stadium en Miami se convirtió en un escenario de caos que ha llevado a varios aficionados a presentar demandas contra laConfederación Sudamericana de Futbol(Conmebol) y los directivos del estadio, según informó ESPN.
Las demandas fueron interpuestas por aficionados que, habiendo comprado boletos, no lograron ingresar al recinto debido a la incapacidad de las autoridades locales para controlar la gran cantidad de personas que intentaron ingresar al estadio sin boletos. La situación se salió de control y culminó en una serie de eventos que pusieron en peligro la seguridad de los asistentes.
Jacqueline Martínez fue la primera en presentar una denuncia, el lunes 15 de julio, en el Tribunal del 11° Circuito Judicial del Condado de Miami-Dade. Su demanda va dirigida contra South Florida Stadium LLC(Hard Rock Stadium) y la Conmebol. Para el miércoles 17 de julio, otras tres personas, Marta Pintos, Eduardo Martínez y Nicolás Osorio, presentaron una segunda demanda contra los mismos acusados.
Cada una de las demandas busca más de 100 mil dólares en daños y perjuicios.
El caos se desató el domingo durante la final entre Argentina y Colombia, cuando cientos de aficionados sin boletos rompieron las barreras de seguridad para ingresar al estadio. Este incidente retrasó el inicio del partido en 82 minutos. En un intento por controlar la situación, el personal del estadio cerró las puertas, lo que incrementó el peligro de aplastamiento entre la multitud descontrolada.
La situación ha generado una gran controversia y ha puesto en tela de juicio la capacidad de las autoridades y los organizadores para manejar eventos de esta magnitud. Los demandantes buscan justicia y una compensación por los daños sufridos, mientras que la Conmebol y los directivos del Hard Rock Stadium enfrentan un escrutinio público considerable.