Argentina confirmó su supremacía continental al vencer 1-0 a Colombia en la Final de la Copa América, logrando su decimosexto título. Con este bicampeonato, la Albiceleste, encabezada por Lionel Scaloni, se convirtió en el máximo ganador del certamen, dejando atrás a Uruguay con 15 títulos.
Este triunfo, sumado a la Copa América de 2021 y el Mundial de Catar 2022, conforma la llamada Triple Corona, un logro histórico que demuestra el gran dominio del equipo argentino en el futbol mundial.
Como era de esperarse, Leo Messi fue una de las figuras del torneo rompiendo récords, sin embargo, en la Final se lesionó y tuvo que abandonar el partido. El astro argentino sufrió una lesión muscular en el tobillo derecho y fue sustituido por Nicolás González.
A pesar de la lesión, Messi añadió se convirtió en el jugador que más finales ha disputado en la historia de la Copa América con cinco (2007, 2015, 2016, 2021 y 2024), superando a Javier Mascherano. Además, Messi ostenta el récord de más partidos jugados (39), el de victorias (24) y es, junto al brasileño Zizinho, el único que ha marcado en seis ediciones distintas (solo falló en 2011).
En cuanto a las figuras del torneo están Lautaro Martínez, quien terminó la Copa América como máximo goleador con cinco anotaciones, siendo una de ellas el gol del triunfo ante Colombia en la Final. Además, Ángel Di María jugó su partido 145 con la camiseta albiceleste, el último después de que comunicase que esta Copa América iba a ser su último torneo. Para su fortuna, su último partido lo culminó con el bicampeonato.
James Rodríguez fue el mejor futbolista del torneo. El colombiano llevó a su selección a la Final del torneo, tercera en su historia, con seis asistencias y una anotación. Desafortunadamente, el delantero no pudo conquistar el trofeo.
En cuanto al torneo, también se destacó que las brasileñas Edina Alves y Neuza Back, y la colombiana Mary Blanco se convirtieron en las primeras árbitras en dirigir un partido en el torneo, en el encuentro entre Bolivia y Panamá en Orlando.
Desafortunadamente el certamen también tuvo momentos para el olvido como fueron las canchas utilizadas. Jugadores y técnicos lanzaron repetidas quejas sobre el estado del césped, por lo que la organización del torneo deberá mejorar significativamente para el próximo Mundial de 2026.
El torneo estuvo marcado por episodios de violencia y desorganización, especialmente durante la Final, con aficionados argentinos y colombianos en un caos para ingresar al Hard Rock Stadium de Miami, donde algunos intentaron entrar sin entradas.