LeBron James ha llegado a un acuerdo para un contrato máximo de dos años y $104 millones con Los Angeles Lakers, según informaron de ESPN el miércoles. Este nuevo acuerdo incluye una opción de jugador y una cláusula de no intercambio.
El regreso de James a los Lakers abre la posibilidad de un hito histórico en la NBA: la oportunidad de jugar junto a su hijo, Bronny James, quien fue seleccionado por los Lakers en la segunda ronda del draft la semana pasada. De concretarse, sería la primera vez que un padre e hijo juegan juntos en la liga.
La semana pasada, James decidió no ejercer el último año de su contrato con los Lakers, valorado en $51.4 millones, para la temporada 2024-25. Su agente, Rich Paul de Klutch Sports, explicó que James estaba buscando mejorar la plantilla mientras negociaban un nuevo acuerdo.
Paul también mencionó que James estaba dispuesto a firmar un contrato por debajo del máximo de tres años y $162 millones al que era elegible, para dar mayor flexibilidad a los Lakers en la construcción del equipo. Según una fuente, las conversaciones continúan y es posible que James acepte alrededor de $1 millón menos que el máximo permitido, facilitando así la mejora del roster.