Javier Aguirre, entrenador del Espanyol, explicó después de la victoria ante el Mallorca que “era muy importante hacerse fuertes en casa pero aún queda mucha tralla, muchos entrenamientos y partidos por delante”, para conseguir la salvación, objetivo del equipo.
El preparador mexicano alabó a sus futbolistas: “Estoy contento con todos, con los que juegan y los que no juegan. Es bueno este resultado cuando pones esfuerzo, actitud y superas la adversidad. Y parece que ahora hasta el equipo tiene fortuna, algo que no sobra nunca”.
Aguirre consideró negativos los silbidos de un sector de la afición al delantero portugués Rui Fonte. “No está bien que silben, pero la gente es libre de manifestarse como quiera. Es un muchacho que se entrega, se esfuerza al máximo y muestra mucha solidaridad con el grupo. Espero que no se repita”.
Sobre el error del central mexicano Héctor Moreno en el empate a uno, el técnico destacó cómo el jugador se ha rehecho de su error en la segunda mitad: “Le he dicho que el error monumental sería si hiciera una segunda parte lamentable o si le diera vueltas y vueltas a la jugada. Pero sacó la casta”.
Finalmente, Aguirre explicó que pese a que el centrocampista Joan Verdú estaba más pegado a la banda que de costumbre “su intención no era tirar centros, sino buscar movimientos de atracción, intentamos buscar variantes, que los jugadores sean más completos, pero en mediapunta es extraordinario”.