Robin Ramírez sintió por primera vez la piel que defenderá a partir del siguiente torneo. Mientras observaba la casaca de los Pumas, tímido y a veces serio, el delantero paraguayo dijo que no sólo quiere escribir su nombre con letras azul y oro, sino que está dispuesto a pasar a la historia tal y como lo hizo su paisano Salvador Cabañas.
Y es que el apodado ‘Niño Maravilla’ aseguró que no le molesta que lo comparen con Chava o que incluso digan que es su sucesor, pues para él es un halago, ya que el ex futbolista del América es su referente.
“Cabañas es mi ídolo, me gusta mucho cómo juega, cómo se para en la cancha, y eso me motiva también porque sé que tengo la posibilidad de seguir sus pasos. Veía sus partidos. Cuando él estaba en la selección mayor, yo estaba en la Sub 20, y ahí lo veía. Le aprendí cosas como movimientos o maneras de pararse en la cancha.