Chivas vive en el torneo, goza y la ilusión en sus seguidores ha vuelto a renacer. Miguel Herrera perdió su primer Clásico como americanista y John Van’t SChip le dio una cachetada con ‘guante blanco’ ayer en el Estadio Azteca como muestra de que la escuela holandesa sí está funcionando en el Rebaño y con Rafael Márquez bajo la faceta de héroe.
El local fue mejor en la parte inicial, destiló peligro, opciones y fue más agresivo que el oponente. El sistema del técnico tulipán fue en primera instancia esperar con orden y tratar de buscar los embates a través de hombres como Marco Fabián, que reapareció con el conjunto visitante.
El trámite del partido cayó en una serie de imprecisiones por parte de ambas escuadras, se vivió una lucha en el mediocampo y por momentos los jugadores inspiraron bostezos a la tribuna.
Fue Guadalajara el equipo que tuvo la primera acción de peligro de la tarde. Marco Fabián se perfiló solo frente al arco rival, pero Hugo González contuvo las gargantas de los rojiblancos con una buena atajada. El público despertó, ya que en una acción posterior, los azulcremas tuvieron la réplica, pero Sambueza también careció de contundencia y Michel contuvo en el fondo.
Lo mejor estaba por venir. En un saque de banda, Chivas rompería la sequía en el marcador al peinar el Chatón Enríquez y dejar solo a Marco Fabián en el área, quien no tuvo piedad para definir de cabeza. A pesar de no ejercer dominio, los tapatíos ya ganaban en el Azteca.
Sin embargo, el gusto duró poco, pues antes de que concluyera la primera mitad, América encontró el empate gracias a una genialidad de Juan Carlos Medina. Al recibir en el área, el Negro recortó a Ponce y no dudó en sacar disparo mortal que hizo revivir a los suyos en la tarde.
En el comienzo de la parte complementaria, Guadalajara se quitó la faceta contragolpista y adelantó líneas. El partido vivió momentos emocionantes con llegadas cargadas de veneno y atajadas por parte de ambos guardametas.
La apuesta ofensiva del Rebaño dio dividendos y se reflejó en la ventaja parcial. Rafael Márquez se perfiló ante la cabaña de González y sacó un disparo que tuvo destino de gol. Como sucedió el sábado pasado ante Morelia, Diego Reyes volvió a desviar el curso de esférico y agarró a contrapié a su arquero, quien ya no pudo hacer nada para evitar la anotación.
El tanto cayó como un balde de agua fría a los pupilos del Piojo; por momentos desaparecieron en el campo y la situación la aprovechó perfectamente Guadalajara, ya que nuevamente Márquez probó a González desde fuera del área y lo tomó adelantado para celebrar su segunda anotación del encuentro.
Más con ganas que con fútbol, las Águilas buscaron la reacción, pero no fue suficiente. Guadalajara volvió a salir victorioso del Estadio Azteca y por primera vez en la campaña acaricia zona de clasificación.