Los Tigres no encontraron la llave exacta para abrir la portería del San Luis e hilvanaron su segunda igualada al empatar 0-0 en el Estadio Universitario… aunque al final les fue callado el grito de gol.
Ni el futbol colectivo, ni el esfuerzo individual, ni los tiros de media distancia fueron suficientes para generar suficiente peligro y aunque anotaron al final gracias a Luis García, el silbante Miguel Ángel Chacón anuló el tanto, provocando desesperación a los 11 auriazules en el campo, y los 40 mil en las gradas, viendo así terminadas las aspiraciones de triunfo.
Un candado con doble remache resultó ser el planteamiento de los Reales sumando ya tres partidos sin recibir gol, llevándose un punto gracias a las labores defensivas y la buena participación de Óscar Pérez, que a la generación de futbol.
Aunque la primera acción se presentó temprano en el partido, cuando al minuto 7 Elías Hernández mandó un centro pasado desde la derecha a Damián Álvarez y el Enano voló su remate, las aproximaciones no fueron tan constantes por parte de los felinos.
Incluso, Wilmer Aguirre estuvo cerca de sorprender al 12′ tras conducir por banda izquierda, llegar a línea de fondo y mandar centro dentro del área que fue bien resuelto por Enrique Palos.
Desde la banca, Alex Aguinaga aplaudía a sus dirigidos en cada acción y pedía replegaran filas cada vez que perdían el esférico, lo que imposibilitó el característico traslado del balón de los auriazules en las postrimerías de la portería visitante.
Para el segundo tiempo, Ricardo Ferretti buscó ser más profundo por las bandas y tener mayor presencia ofensiva ingresando ideas frescas al campo con Francisco Acuña y Alan Pulido, pero el resultado seguía siendo el mismo ante los pocos espacios regalados por el rival.