La selección alemana demostró ser un serio aspirante al título de la Euro luego de vencer con autoridad 4-2 a Grecia, equipo que fue ampliamente superado y que pudo haberse llevado inclusive un marcador mucho más abultado de no ser por la falta de contundencia de los teutones, quienes con este resultado ya esperan rival en las semifinales, mismo que saldrá de la eliminatoria entre Inglaterra e Italia.

No obstante, en el arranque del encuentro, el técnico germano Joachim Löw sorprendió a propios y extraños al dejar en la banca a dos de sus mejores hombres como lo son: Mario Gómez y Thomas Müller, dándole minutos a Miroslav Klose y a André Schürrle, situación que no pareció afectar el nivel de Alemania, que desde el silbatazo inicial se adueñó absolutamente de la pelota.

Por ello, fue precisamente el equipo alemán el que tuvo las primeras ocasiones de peligro en el marco rival, siendo la más importante la generada por Sami Khedira, quien logró mandar la pelota al fondo del marco tras un buen centro desde la banda; sin embargo, el árbitro inválido de manera correcta la anotación por un claro fuera de lugar.

No obstante, pese a la aproximación, los helénicos mantuvieron siempre su estilo de juego, cerrando todos los espacios atrás y buscando generar algo en base a la velocidad de sus atacantes, situación que les permitió acercarse en un par de ocasiones con cierto peligro, pero que al final terminó por costarles y se fueron al descanso con la desventaja en el marcador, esto gracias a un soberbio disparo desde fuera del área de Philipp Lahm, quien puso la pelota en el ángulo al minuto 39 para hacer estallar a todos los alemanes presentes en el estadio.

Para la parte complementaria y ya con la ventaja en el marcador, el combinado alemán pareció relajarse, situación que fue bien aprovechada por los griegos, quienes capitalizaron un error en la salida de Alemania para empatar el partido, esto apenas al minuto 55, cuando Gekas recibió un buen centro en el área chica y con un buen remate de primera intención únicamente empujó la pelota al fondo del marco.

No obstante, la anotación pareció despertar a los alemanes, quienes a partir de ese momento se volcaron con todo al frente, hecho que les rindió frutos tan solo 6 minutos después, cuando Khedira, con una bella volea dentro del área, fusiló al arquero para devolverle la tranquilidad al técnico Löw.

Los germanos siguieron empujando al frente en busca de sentenciar el partido, situación que no tardaron en conseguir, primero gracias a la anotación de Miroslav Klose, al minuto 68, y después por conducto de Reus, al minuto 74.

Por ello, pese a que en los minutos finales Grecia se encontró con el descuento gracias a un penal bien aprovechado por Salpingidis, Alemania no tuvo mayores problemas en concretar la victoria, misma que los tiene ya en las Semifinales de la Euro y como uno de los más serios candidatos al título continental.