El Club Tigres vetará a cualquier integrante de la barra Libres y Lokos que tenga antecedentes penales.

Esta medida, señaló ayer una fuente, será adicional a las ocho pactadas con Rayados, la Liga MX y el Gobierno de Nuevo León tras los incidentes violentos del domingo pasado en la Avenida Aztlán, previo a la edición 117 del Clásico Regio, que se jugó en el Estadio Universitario.

Después de entregar a las autoridades la base de datos del grupo Libres y Lokos, porra que tiene oficialmente 2 mil 121 integrantes, el equipo felino les solicitó la información de los barristas que cuenten con antecedentes penales para ya no dejarlos entrar al Estadio Universitario.

“Ellos (en Tigres) solicitaron a la autoridad esta información”, dijo el informante, “y le negarán la entrada a quienes tengan antecedentes. No quieren que haya ningún incidente”.

Aunque la trifulca que dejó a un aficionado de Tigres gravemente herido fue a distancia del estadio y el domingo sólo hubo un problema menor en la tribuna de CU, el club quiere mantener su récord de 192 juegos sin actos violentos dentro y en los alrededores de su sede.

Entre los puntos que se anunciaron el martes tras la reunión de los equipos con la Liga y las autoridades estatales están que se prohíben las caravanas y que cualquier aficionado de Tigres o Rayados que participe en alguna perderá en automático su lugar en el Estadio Universitario o en el BBVA Bancomer.