Los nervios de jugar en la cancha central del Abierto Mexicano de Tenispudieron con la mexicana Renata Zarazúa, quien cayó en dos sets ante la tercera sembrada del certamen, la australiana Daria Gavrilova.

La capitalina dio un buen primer set con alta efectividad en su primer servicio (87 por ciento) y convirtió dos de sus tres oportunidades de quiebre, pero al final cedió 7-5.

“Sentí que empecé muy lenta, un poco nerviosa. Ella empezó bien, no falló mucho en los primeros juegos y luego poco a poco me fui sintiendo mejor, me fui ‘encanchando’. Era la primera vez que jugaba en el estadio, está increíble, la cancha es un poco más lenta, entonces me divertí al poder trabajar más el punto.

“En el primer set tuve chance de ganarlo 6-4, pero ella después terminó cerrando bien el primer set y le dio un poco más de confianza para empezar bien el segundo también y al final me relajé un poco, empecé a jugar mejor”, declaró tras la derrota.

La oceánica tomó buena ventaja en la segunda manga y, aunque la local quiso reaccionar impulsada por el apoyo de la grada, selló el partido con un 6-3 y tras una hora y 36 minutos de partido en la cancha central, azotada por el fuerte calor de Acapulco.

“Me siento muy triste porque perdí, pero el haber jugado en el estadio y ante una jugadora que es Top 30 fue una experiencia muy grande. Para el tenis femenil es como un apoyo el saber que pude ganar una ronda y, sobre todo, que nos está yendo muy bien últimamente a todas. Espero que el tenis mexicano siga apoyándonos en buen camino”, agregó Zarazúa en conferencia de prensa.