Hace tres años Salvador Cabañas era la figura del América y del futbol paraguayo, estaba en la cima de su carrera, metía goles espectaculares y era un ídolo; pero en la madrugada del 25 de enero de 2010, en un baño de un bar, intercambió palabras con la persona equivocada y ésta le dio un tiro en la cabeza.

Hoy, Chava vive en la casa de sus padres en el barrio de la Sagrada Familia en Itauguá, una pequeña ciudad de Paraguay, donde nació y en donde es feliz.

Lejos de los reflectores, de la fama, de los lujosos autos o casas espectaculares, Cabañas viste playera y shorts, usa sandalias, camina por calles sin pavimentar, entrena fuerte al futbol y no descansará hasta que lograr su objetivo: jugar futbol profesional de nuevo.

“No cambió en nada la vida, Salvador está muy recuperado, estamos haciendo todo lo posible para que juegue otra vez futbol profesional y la verdad es que estamos muy contentos en la familia con él”, afirma Dionisio Cabañas, padre de Salvador.

“Ahora está trabajando en su recuperación, he visto a Salvador mucho mejor físicamente que antes. Está muy bien ahora”.

Los padres de Cabañas son los más felices por tenerlo en su casa de nuevo, vivo y recuperado. Están conscientes de que las probabilidades de que su hijo sobreviviera eran mínimas y lo logró.

“Los milagros existen y por eso Salvador está todavía”, asegura Dionisio.

Salvador amplió la casa de sus padres y construyó una panadería, que es el negocio familiar. También tiene un polideportivo y un lavadero de autos. Por las mañanas, la familia hace el pan, y por la tarde, Chava ayuda a venderlo en la localidad.

“Vivir con tu familia es lo máximo. Estoy feliz con mi vida, con toda mi familia, con mis padres y aparte trabajando a full, que es lo más importante”, dijo Cabañas al programa ‘El Conejo’ de la televisión Telefuturo de Paraguay, en una entrevista realizada en diciembre pasado.

Tras sobrevivir del balazo, lo primero que dijo Cabañas era que iba a jugar futbol de nuevo. Era el 2010. Muchos no le creyeron, pero lo logró. Chava jugó con el equipo 12 de Octubre de la Tercera División de Paraguay, en el cual fue Campeón y ascendió a la Liga Intermedia o Segunda División en septiembre del 2012.

Pero Cabañas no se conforma, quiere regresar a ocupar su lugar en el futbol y jugar de nuevo en la Selección de Paraguay, aunque los médicos han dicho que esto es imposible.

“Salvador día a día se está recuperando y quiere jugar otra vez en el futbol profesional y por eso está trabajando todavía en su recuperación”, explica Dionisio. La meta de Salvador es jugar otra vez en la selección”.

A tres años del atentado que cambió el rumbo de un futbolista exquisito y letal en el área, hoy celebra el gol más importante de su carrera: estar con vida.