Hay delanteros que logran quedarse en la memoria de la afición por sus actuaciones, así sucedió con el boliviano Joaquín Botero, quien a 14 años de haberse ido por primera vez de la Liga MX, todavía se le recuerda con Pumas. De cara al Apertura 2003, el Club Universidad confirmó la contratación del ariete, quien llegó con la etiqueta de matón, porque en sus últimas temporada con Bolívar hizo 49 goles en 40 partidos, luego ocho en ocho duelo.

Con tal récord, las expectativas eran altas, el problema es que siempre se quedó lejos de cumplirlas porque en su mejor torneo se adjudicó 11 anotaciones, fuera de ese Apertura 2004, únicamente hacía tres tantos por justa, aunque formó parte del bicampeonato de 2004.

Fue en el segundo semestre del 2006 que Botero abandonó a Pumas para irse a San Lorenzo, ahí no pudo brillar y por eso deambuló por clubes como Deportivo Táchira de Venezuela, Bolívar e incluso vivió otra etapa en el futbol mexicano con Correcaminos.

La aventura continuó por Kuwait con Al-Arabi en 2010, pero la estadía fue efímera, siendo que en la campaña 2013-14 con Sport Boys donde logró el ascenso para luego retirarse. Fueron seis años en los que Botero se dedicó a desarrollar proyectos personales y estar con su familia, hasta que en febrero de 2020 se anunció a los 42 años de edad su retorno a las canchas, ya que firmó con el club de la Universidad de San Francisco de Asís (USFA) en Tupiza.