William Palacios, delantero colombiano de Lobos BUAP, está molesto por las versiones periodísticas que surgieron por la pelea que protagonizó con Julián Quiñones. Aseguró en entrevista que aunque se pelearon tras beber esa noche, nunca agredió a su ahora excompañero con un cuchillo y tampoco tuvo un altercado físico con su esposa.
“Van dos versiones que ninguna es verdadera. Primero dicen que fue en un bar, que Julián por defenderme y no sé qué más y la verdad fue la siguiente: salí un rato con unos amigos, cuando regresé Julián estaba en su casa, estaba tranquilo, con sus amigos también. Estuve en su casa un ratito, estábamos muy tomados todos y vino detrás de mí, estábamos bien y llegué a mi casa”.

“Mi señora sabía que me fui a tomar y estaba brava, estaba enojada porque no llegué a la hora que le había dicho, pero en ningún momento le pegué, ella puede declararlo, no la maltraté, no hay problema por eso, porque estamos unidos y tranquilos… Yo quería que él se fuera y él no quería, le dije varias veces que se fuera y de ahí empezamos a pelear, que son cosas normales y que pueden pasar”.

“Eso fue como a las tres o cuatro de la mañana. Peleamos, le pegué con el puño y lo lastimé. Él, con todo el derecho de defenderse, buscó su cuchillo, me lastimó en la cabeza y después, en el forcejeo, él se cortó en los dedos, pero no fue como dice la gente de que él por defenderme y que yo lo corté. La gente habla tanta cosa que no tiene nada que ver”, relató el jugador.
El cafetalero aseguró que esta versión fue informada al club, por lo que no entiende la decisión que de separarlo. Recalca que Quiñones se lastimó solo los dos dedos de la mano. Incluso, mostró un audio en el que supuestamente Julián admite que esto pasó.
“Él fue el primero en ir al hospital, yo estaba en la casa, vinieron todos los profesores, les explicamos lo mismo que estamos diciendo a ustedes. Luego salieron todas las declaraciones que no tienen nada que ver y decidieron apartarme del equipo porque dicen que tienen pruebas de que supuestamente tengo más antecedentes, que tengo una cláusula y esas son cosas del contrato que firmé y lo que he firmado. La decisión que están tomando la estoy respetando y asumiendo, pero no voy a permitir que manchen mi nombre con cosas que no han pasado”, dijo.

El colombiano acepta que la decisión de salir tal vez no fue la mejor, pero argumenta que se trataba de su noche libre y se siente triste de dejar México de esta manera.

“Uno viene con una ilusión, con ganas de venir a triunfar, pero a veces uno toma malas decisiones y hay que pagar los platos rotos. En estos momentos me tocó a mí y es difícil para mí y a mi familia. Veníamos con una ilusión y nos vamos con las manos vacías. Habíamos ganado y teníamos la libertad de hacer lo que quisiéramos, pero lo conveniente era estar en casa sin hacer nada. Independientemente de eso están los problemas en mi casa, esos yo los resuelvo y empezamos a pelear en mi casa”, comentó.