Sin resentimientos por lo vivido en Chivas, Carlos ‘Gullit’ Peña está totalmente concentrado en su nueva etapa con León. De lo hecho en el ‘Rebaño’, lo califica como “bueno” y evita entrar en conflicto de declaraciones.

Al ser cuestionado directamente por las declaraciones que hizo la directiva de Chivas sobre su paso por ahí, donde fue severamente criticado, en su presentación con León, Peña comentó: “Nunca hablo mal de las personas que me dieron de comer a mí y a mi familia, su opinión es muy respetable… estoy tranquilo, estoy contento con Chivas, siempre me trataron bien”

Sobre su desempeño deportivo, aseguró que “en lo personal lo considero bueno, metí ocho goles, fui el que más anotó en ese tiempo, tuve una Súpercopa, nos salvamos del descenso y entramos en dos veces a la liguilla”.

Aunque tiene etiqueta de ídolo e histórico en León, el mediocampista Tamaulipeco entiende su nueva posición en su regreso. El entrenador Javier Torrente también ya le advirtió que ahora tiene un titular en su lugar (Leo López) y él debe buscar ganarse ese puesto.

“Hay que ir paso a paso, nunca me gusta prometer de más… estoy muy contento de estar de nuevo en León; vengo a aportar lo que di desde el primer día, espero estar en buen nivel, ayudar al equipo a ganar, ya el Profe (Torrente) decidirá si me pone titular o no, pero siempre tener buena cara y hacer buen grupo”, indicó.

El entrenador argentino ya comenzó la ‘operación’ para rescatar a Peña, incluso en un entrenamiento lo alejó de la práctica para dialogar con él frente a frente y separado del resto. “De eso, algunas cosas se pueden decir, eso es con todos los jugadores, con todos los entrenadores, pero sí que espera de buen nivel de mí, el que me llevó a Selección”, apuntó.

Para rescatarlo, la directiva del León, a través del vicepresidente Rodrigo Fernández, comentó “lo conocemos y va a tener el apoyo, va a rendir lo que Chivas le costó por la presión, acá está respaldado desde su afición; seguramente va a ser bien las cosas”.

En el León, Carlos Peña, ‘Gullit, usará el número 27, el que siempre usó y mismo que quedó sin usarse en su ausencia.