Ignacio Ambriz, director técnico del América, visitará a Dorados y aseguró que ningún partido lo vive con presión pese a los rumores que lo sitúan fuera del banquillo azulcrema.

“No, ni uno. La presión para mí es amanecer con vida y después preocuparme porque mis hijos estén bien.

“No sé, yo estoy tranquilo. Hemos trabajado bien durante esta semana, corrigiendo detalles en que nos equivocamos el día de Pachuca”, reveló.

El timonel reiteró que no hay presión dentro del Nido; sin embargo, aseguró que es obligación de su equipo conseguir los tres puntos.

“El sábado tenemos que sumar sí o sí y no por que esté en riesgo lo mío, sino que creo que este equipo no se merece haber perdido como fue el sábado pasado”, declaró el estratega antes de abordar el avión rumbo a Sinaloa.

Ambriz asumió la responsabilidad de las críticas y del irregular arranque de campeonato de las Águilas, por lo que negó que esos comentarios afecten dentro del vestidor del conjunto de Coapa.

“Es contra de mí, no contra el grupo. No tiene porque afectarle, ellos son profesionales, todos nos dedicamos al futbol y simplemente les pido que estén tranquilos porque tenemos que hacer un buen partido”, expresó.