Una de las posiciones más complicadas dentro del futbol es la de portero, sin embargo, para Iván Martínez se ha convertido en una pasión debido a lo compleja que puede resultar.

A pesar de que inició su camino como defensa, pronto descubriría que su puesto ideal era en la portería.

“Empecé a jugar desde los cinco años y a los siete me metieron a una escuela de futbol. En ella estuve durante 10 años practicando toda la semana, pero yo empecé como defensa porque siempre fui más alto y, a partir de los 10 años, empecé como portero con los entrenamientos y todo el enfoque hacía la posición y no la dejé nunca, hoy a mis 32 años es en la que sigo jugando”, aseguró el guardameta.

Después de 22 años defendiendo el marco, no hay razón alguna por la que dejaría de lado los guantes, ya que se han convertido en un complemento que lo acompañará por el resto de su vida.

“Definitivamente nunca cambiaría la portería, empecé como defensa central, hoy en día afortunadamente soy portero y no pienso dejarlo hasta los últimos días que pueda jugarlo seguiré siendo portero”, explicó Martínez.

Lo que más disfruta Martínez al momento de entrar a la cancha es la presión que como arquero se le exige, además de poder disfrutar jugando con las personas que más quiere.

“Me encanta la presión que la posición como portero te exige, creo que es fundamental y no cualquiera se anima a jugarla, ya sea por las condiciones o porque le interesa más la atención de los goles. Disfruto poder practicarlo en compañía de mis amigos y con mi familia”. comentó el arquero amateur.

Su amor por el deporte lo llevó a realizar un viaje por Europa para vivir en carne propia el ambiente que hay en los estadios del Viejo Continente.

“Es totalmente diferente en todos los sentidos, desde el nivel futbolístico, la logística, la cultura, la gente, los estadios, todo es diferente,  es una pena que aquí estemos tan rezagados en ese sentido y principalmente algo que me dejó muy marcado y trato de compartirlo es el respeto, la gente en Europa es súper respetuosa, sin importar el equipo que seas, al local o al visitante, existe una rivalidad, pero no va más allá de lo deportivo. Estuve en Londres, Barcelona, Madrid y Milán”, recordó el jugador.