Pese a estar 84 minutos desaparecido de la Ida de la gran Final, Gignac se encargó de resucitar a Tigres, que perdía por 0-2 y logró llevarse a Guadalajara un marcador de 2-2, que deja todo servido para un partido inovidable en el Estadio Chivas.

Tigres arrancó como el equipo poderoso que mostró ser durante toda la Liguilla, pero no fue contundente de cara al arco. Al 9′ Gignac sacó calcetinazo directo a las manos de Cota y al 20′, Dueñas no pudo concretar una opción clara de gol con el arquero vencido.

El error lo pagó muy caro Tigres, pues sólo un par de minutos después, Pulido aprovechó un pésimo rechace de Nahuel Guzmán y dentro del área chica empujó el balón al fondo del arco para abrir el marcador, ante la mirada atónita de los miles de aficionados felinos que se dieron cita en el Volcán.

El encuentro se volvió de ida y vuelta, los felinos buscaron el tanto de la igualada, pero al 42′, Nahuel volvió a cometer un costoso error: ante remate de Pulido dejó el balón ‘muerto’ dentro del área y Pizarro llegó a firmar el 0-2.

En el complemento, Chivas manejó a placer el marcador, pero no se conformó. Dejó que Tigres tuviera posesiones de balón, pero bien plantados en zona defensiva, costaron los avances felinos para salir a toda velocidad en búsqueda del tercer gol que sentenciara la Final.

Al 62′, Damm mandó centro retrasado, pero la defensa del Rebaño logró evitar el remate. Guadalajara se sintió amenazado, Almeyda mandó modificaciones al campo y al 75′, por poco Pulido marca el tercero, pero en esta ocasión Nahuel respondió.

Pero a Tigres nunca se le puede dar por muerto, al 85′, Damián Álvarez mandó centro al área donde Gignac remató de media vuelta para recortar el marcador.

El Volcán explotó al 88′, cuando el francés se quitó la salida de Cota y en el borde del área sacó disparo para poner el 2-2 definitivos.