La violencia no termina en Veracruz y ahora la sufrió un joven futbolista de Albinegros de Orizaba, Éder Gutiérrez, el cual se mantiene con muerte cerebral tras recibir un impacto de bala en la región occipital.

El jugador de Segunda División de 22 años fue uno de las seis personas agredidas con arma de fuego a las afueras de un famoso antro llamado Shine. Los médicos aseguran que Éder necesita de un verdadero milagro para no perder la vida.

Un testigo de los hechos reveló para Blog Expediente: “No hubo discusiones, mucho menos pleitos en el antro. Ellos, los agredidos, terminaron de convivir como a las tres y media de la madrugada y al salir les dispararon a todos”, dijo.