Ciudad de México – Gran parte del futuro del balompié mexicano se definirá este miércoles en la Federación Mexicana de Futbol, cuando los directivos del Comité de Desarrollo se reúnan con los altos mandos de la Asociación Mexicana de Futbolistas Profesionales.

Los jugadores recibirán la respuesta a las peticiones hechas la semana pasada en la primera reunión que se realizó en un hotel del aeropuerto capitalino, donde se presentaron Enrique Bonilla, presidente de la Liga MX, Guillermo Cantú, secretario general de la Femexfut y Yon de Luisa, futuro presidente de la Federación, quienes llevaron la voz de la AMF a los dueños de clubes.

En caso de que no se llegue a un acuerdo, los futbolistas tienen contemplado parar la liga durante la Jornada 17 del Clausura 2018 a menara de presión, algo que incluso retrasaría los planes de la Selección Mexicana de cara a la Copa del Mundo.

Entre las peticiones que hicieron los futbolistas fue erradicar el “Pacto de Caballeros”, que les impide contratarse con cualquier otro equipo cuando se termina su contrato, además de que algunos jugadores que están en el extranjero deben pedir permiso a su exequipo para volver.

La otra exigencia es tener un mayor margen de contratación dentro de la Liga MX y no solo el día en que se realiza el Régimen de Transferencias como lo es hasta ahora, para que así no exista mucha presión para firmar un contrato.

A estos dos requerimientos agregaron a su lista el hecho de cambiar la regla 9/9 para que sean cinco jugadores mexicanos en la alineación titular, tener una mayor transparencia en los salarios y contratos, así como una beca para formar parte de la Escuela Nacional de Directores Técnicos y de paso tener una mejora en la Liga Femenil MX, que incluya un aumento en los sueldos de las jugadoras.

Durante la pasada reunión los jugadores recibieron una propuesta de los dueños de tener un cierto tiempo para erradicar el pacto, ya que no lo quieren terminar de raíz sino poco a poco, algo que no agradó a la AMF y por eso se tuvo que alargar por una semana más.

Una fuente reveló a Mediotiempo que la opinión de los dueños de clubes está dividida, pues unos pretenden hacer caso a los jugadores y otros no desean darles tanto poder, pues entienden que así ya no serían los ‘mandones’ del futbol mexicano.