A Pep Guardiola le preguntaron una vez qué era lo que añoraba de México. Él, sin pensarlo demasiado, dijo tres cosas: la comida sinaloense, al dueño de Dorados y a ‘Chevo’, su gran amigo.

El famoso ‘Chevo’ responde al nombre de Eliseo Martínez, es un tipo regordete de 46 años que no supera el 1.70; estudió licenciatura en derecho pero en Dorados trabajó como auxiliar administrativo por varios años.

“Eliseo es muy bromista, alegre, es una persona muy propositiva, cuando hay reuniones es muy buen conversador. Es una persona muy noble, siempre está dispuesto a echar la mano”, así lo define Javier Llausás, encargado del marketing de Dorados.

Todo inició en el 2006, Dorados jugaba en la entonces Primera División y Juan Manuel Lillo era el entrenador del equipo. Él convenció a su amigo Guardiola para que lo acompañara en su aventura por México.

“Yo no sabía quién era. Me dijo Lillo ‘voy a traer al mejor jugador del mundo’. Cuando yo lo vi, para la estrella que era él, era una persona normal, sencillito, sencillito. No hizo alarde de nada”.

El encargado de administrar las finanzas de Guardiola era él. Pep le daba sobres con dinero y éste se encargaba de pagar las comidas o cualquier otra cosa.

“Fuimos a un restaurante. Esa vez Pep Guardiola le regaló 500 pesos al mesero. Le dijo el muchacho: con esto que me diste mañana te voy a ver’.

“Me dice Pep, como enojado: ‘éste, ¿qué se cree?’. Le dije: ‘no, lo que pasa es que no entiendes que lo que le acabas de dar es un chorro de dinero y te agradeció'”.

El final de la aventura de Pep en Culiacán fue agridulce. El equipo terminó en octavo en el Clausura 2006 con 22 puntos, con eso le alcanzaba para clasificar a la Liguilla pero por el sistema de competencia, los sinaloenses descendieron.

“Él me dijo que si me animaba a ir a Barcelona. Le dije que no, que le tenía miedo a los aviones. Mejor lo veo por la tele, más a gusto, y me evito esos problemas”.

La directiva de Dorados le encargó ser el asistente de Guardiola. Tenía que llevarlo a todos lados.

La primera cosa que Pep le preguntó fue dónde había un campo de golf, aunque en Culiacán hay uno, no se lo recomendó por el clima caliente de la ciudad.

Una vez, Pep le preguntó a Eliseo que si con 15 mil euros le alcanzaba para vivir un mes en Culiacán. El técnico español deseaba mandar a su país el resto de su sueldo.

-Oye ‘Chevo’, ¿qué tanto dinero ocupo en Culiacán para mantenerme un mes? ¿Me alcanzarán 15 mil euros?

-¿Cuánto?

-Bueno, si no pido un poquito más.

-Con 15 mil euros yo vivo un año y medio. Es un chingo de dinero.

“Y Guardiola soltó la risa”, recuerda el ‘Chevo’.

El entonces asistente sólo ha tenido comunicación por teléfono con Josep Guardiola. La última vez que hablaron fue antes de que el catalán dejara de ser entrenador del Barcelona.