Después de vivir su primer partido como nuevo técnico del Puebla, José Luis Sánchez Solá se emocionó hasta las lágrimas al reconocer que se encontraba nervioso por su retorno a la institución.

“Estoy muy emocionado, sumamente nervioso, no quería quedar mal a la gente, al público que hizo el favor de venir (al Estadio Cuauhtémoc). Estaba muy mal, me sentía muy nervioso.

“Puebla es una grandísima institución y sino estoy yo, estará otro y todo mundo que llega a Puebla ya se está dando cuenta lo que le gusta a la gente, entonces el que llega a Puebla en mi lugar, la institucion cada vez va a ser más grande”, destacó el técnico en conferencia de prensa.

Tras la destitución de Enrique Meza, el Chelís tomó el mando del equipo de la Franja, quien debutó con un agónico empate de 1-1 frente al Pachuca en la Jornada 7 de la Liga MX.