Ciudad Victoria, Tamaulipas.-Las agresiones verbales y físicas hacia los árbitros, han existido desde hace mucho tiempo dentro del futbol, lamentablemente cuando la pasión se desborda ante una decisión polémica esta termina repercutiendo en el desempeño de los jugadores o afición, afectando al hombre que imparte justicia en el terreno de juego.

En los últimos meses en el futbol local cada vez es más frecuente las amenazas verbales hacia los nazarenos, incluso existen casos de agresión física en las últimas semanas donde por fortuna no termina en mayores problemas. Pero ¿qué opinan los silbantes sobre este tema?, en muchas ocasiones el único que calla y que sufre junto con sus familias por su profesión.

Extremo Deportivo se dio a la tarea de entrevistar a los silbantes sobre el tema, trabajo que jornada a jornada realizan, y en qué punto de la evolución del futbol “llanero” se está perdiendo este respeto hacia el hombre de negro.

“Por un lado creo que la polémica está creciendo por la falta de actualización de los jugadores, el futbol sigue evolucionando, al igual que por muchos árbitros que no se actualizan, allí es donde se genera el actuar de las personas involucradas en querer argumentar algo que no está en las reglas, y en las exigencias de la falta de valor hacia nosotros, creo que también se están olvidando que somos seres humanos y nos equivocamos, dejamos muchas cosas para estar al cien, anímicamente empieza a afectar tanto descontrol en las ligas, cuando te ofenden desde las gradas y en ocasión hasta que te llegan a agredir físicamente, no somos un maniquí donde se pueden descargar con nosotros, es frustrante y una impotencia cuando eso pasa porque piensas que todo se va acabar, la genta no ha sabido valorar las funciones de un árbitro de los que verdaderamente estamos capacitados, y lamentablemente eso viene en muchas ocasiones desde niños, cuando todo empieza por querer fingir una falta”, asienta Iván Rodríguez, arbitro que actúa a nivel profesional y también en ligas amateur, contando con 9 años de experiencia.

Creación de nuevas ligas

Irónicamente la creación de ligas de futbol ha afectado también la imagen del árbitro, y es que cuando en un inicio se pensaba que beneficiaria el poder realizar su trabajo en diferentes puntos de la ciudad, y recibir su paga por desempeñar su trabajo, esto vino a demeritar la preparación de los nazarenos, ya que en muchas ligas solo se ve con el beneficio de algunos cuantos, metiendo a “pitar” a cualquier persona, creando que el jugador vea demacrada la imagen del silbante y se sienta con derecho de reclamar o agredir verbalmente, por la misma falta de carácter y capacitación.

“Existen árbitros que pitan por solo pitar, y eso afecta porque no les muestran respeto, insultan, agreden y ni una tarjeta al jugador, no tiene pasión por el arbitraje, y los que estamos preparados nos vemos afectados”, comenta Carlos Ramos, silbante con más de 10 años de experiencia, señalando que esto es parte de la problemática, y no importando la retribución económica por los servicios, jamás tendrá comparación ante una agresión física.

“Económicamente te ayuda para solventar alguna necesidad en muchos casos, pero cuando uno sufre una agresión por un “peso”, eso jamás tendrá retribución porque los que viven de esto sufren, y por supuesto las familias que hay atrás de ellos, gracias a Dios yo en lo particular tengo trabajo aparte del arbitraje pero no todos los casos son así”, señaló.

Ex profesionales

Los torneos más concurridos de futbol en Victoria, han dejado de ser amateur, esto luego de la inminente llegada de ex profesionales que también reciben dinero al llegar a equipos grandes en el futbol del llano, situación que también afecta al silbante, tras sentirse el jugador con esa “experiencia” de poder juzgar o presionar a los nazarenos, todo por jugar a nivel profesional.

“Por algo estamos allí, me refiero a los que realmente están capacitados para llevar un juego de futbol, el jugador ex profesional cree que su experiencia les dio para saber todo del futbol y no es así, porque cada fin de semana se nos presentan cuestiones básicas del reglamento que los ex profesionales no las conocen y por eso se crea el clásico “yo si se, más que tu”, “yo llegue al profesional, tu no”, todos esos roses entre ex profesional y silbante, provocando que los demás jugadores crean en el ex profesional y mal informen al jugador, desatando incluso las agresiones”, expresa Héctor Coronado, nazareno con 2 años de experiencia.

El futbol evoluciona

Cabe destacar que la evolución en los deportes es inevitable, y el futbol también tienen sus adecuaciones año con año, situación que desconoce el jugador, teniendo la idea de que las cosas son en una manera, cuando para el árbitro actualizado por su conocimiento la aplica de acuerdo al reglamento.

“La falta de actualizaciones desata ignorancia, y es difícil, porque el futbol como cualquier otro deporte está en constante movimiento, y cada día van surgiendo reglas o modificaciones que antes ni imaginábamos, eso es teóricamente, pero incluso físicamente también el árbitro tiene que estar al cien para poder dar un buen servicio, eso nadie lo ve ni lo analiza, para el jugador es más fácil gritarle, mentar madres, y pensar que está en lo correcto, sin saber lo que puede desatar en el terreno de juego”, agrega Iván Rodríguez.

El árbitro, un ser humano más

Para algunos esto puede ser un pasatiempo, para otros un estilo de vida, pero para otros es una fuente de trabajo, el silbante en la mayoría de los encuentros es el villano, el malo, el ratero, el vendido, pocas veces es el estimado y quizá no deba de serlo, pero si respetado.

Porque dentro del pasatiempo el hombre de negro promueve el deporte, siendo juez en un deporte que es el más disputado en el mundo, porque vive con la misma pasión al grado de sentir que es un estilo de vida, y porque en muchas ocasiones es una manera de sobrevivir al recibir un pago por sus servicios, coincide Juan Carlos Martínez Olivares, arbitro con experiencia profesional y con 23 años de carrera.

“En ocasiones créeme que no es tanto el jugador, si no el entorno de la gente que los rodea ese orgullo mal inducido de solo aceptar y acatar las reglas, uno tiene fracción de segundos para decidir y obviamente a todos les gustaría tener las decisiones a su favor, incluso la gente que va a apoyar, creo que es a lo que más nos enfrentamos los árbitros partido tras partido, uno nunca deja de aprender, uno es una figura pública dentro y fuera de la cancha, el respeto se imparte adentro y afuera, yo a mis hijos les digo que desde que tú te levantas tienes que ver tu manera de vestir, la manera en que te ven, yo creo que eso viene de la casa, es por eso que el respeto se ha perdido”, concluye.

Los árbitros son para muchos el “terror de las canchas”, sin embargo, son la autoridad dentro de la cancha y al igual que el jugador solo buscan desarrollar sus encuentros de la mejor manera.