La pelea pintaba bien para el retador pero terminó rápido. Anderson Silva salió valiente y con una estrategia diferente para intentar arrebatarle el campeonato de las 185 libras de MMA a Chris Weidman, la situación parecía controlada y finalizó inesperadamente.

En el primer asalto el campeón quiso mantener a Silva a nivel de lona pero no lo consiguió. Anderson logró escapara de las llaves en un par de oportunidades y se incorporó en el octágono.

Para el segundo episodio, el retador tenía la situación bajo control y puso en marcha su estrategia: las patadas. Weidman sufrió en el primer minuto pero antes de que pudiera pensar cómo acabar con Silva, éste pateó desde abajo y Chris sólo rechazo el ataque para partirle la pierna en dos trágicamente y así retuvo su título.

Chris Weidman continúa invicto con 11-0-0 mientras que el lesionado Silva se quedó con 33-6-0.