Luego de pasar seis días en Rosario, Argentina, Lionel Messi regresó este martes a Barcelona para incorporarse al equipo en un vuelo privado luego de estar recuperándose de una molestia en el tobillo derecho que lo ha aquejado.

La Pulga estuvo acompañado de su esposa y sus tres hijos, a la postre se dirigieron a su domicilio en Castelldefels en medio de una gran expectación, pero ahora la prensa no pudo acercarse al argentino con la zona acordonada, a diferencia a lo ocurrido en su último regreso cuando le cuestionaron sobre su relación con Antoine Griezmann.

Ronald Koeman le concedió las vacaciones a Leo hasta el primero de enero, fecha en la que toda la plantilla blaugrana volverá a los entrenamientos, puesto que tras el duelo contra Eibar, tendrán dos días libres por Año Nuevo.

Al estar ya en Barcelona, no descartan que Messi haga acto de presencia en el Camp Nou para presenciar el duelo contra Eibar, junto a Gerard Piqué, Sergi Roberto y Ansu Fati, quienes están lesionados.