La familia Sulaimán Saldívar es un mar de sentimientos. Hay tristeza por la partida de su pilar José Sulaimán, pero también hay felicidad por ver que Mauricio pudo alcanzar la confianza de los agremiados del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) para continuar el legado que dejó su padre.

“Ha sido muy duro para la familia la pérdida de mi esposo porque teníamos muchas esperanza e ilusiones de que saldría cuando se nos enfermó del corazón, pero, desafortunadamente, Dios así lo dispuso. Ahora, con Mauricio, es un orgullo para toda la familia que continúe con los 38 años de trabajo que hizo su padre para el boxeo”, comparte Marta Saldívar, madre de Mauricio y viuda de José Sulaimán.

En primera fila, Marta Saldívar, sus hijos con sus respectivas parejas y nietos fueron testigo de los homenajes que recibió Sulaimán durante la junta extraordinaria del organismo para elegir a su nuevo presidente. Ahí fueron testigos de un video biográfico de “Don José” que provocó las inevitables lágrimas de la familia, así como de los integrantes de la junta de gobierno del CMB. Un duelo que aún permea entre los allegados a Sulaimán Chagnón.

“Estamos pasando una etapa muy difícil porque apenas se va a cumplir un mes de que se nos fue José. Ha sido muy difícil para superarlo. En lo personal, siento un gran vacío todavía, pero Dios es muy grande y todos podemos salir adelante como mi esposo lo hacía ante sus retos”, comparte la viuda.

Los integrantes de la familia Sulaimán Saldívar pasaron de las lágrimas de dolor a las de felicidad cuando se nombró a Mauricio como sucesor de su padre.

“Por supuesto que Mauricio es el indicado para asumir el puesto. Además de que es mi hijo, creo que él tiene todas las posibilidades para llevar esto adelante de la mejor forma igual que lo hizo su padre”, resalta Saldívar.

El mismo nuevo presidente del Consejo Mundial admite que estaba dudoso de aceptar el puesto en caso de ser nombrado. El reciente fallecimiento de su padre lo hizo dudar de que esa fuera la mejor decisión. Por ello, sostuvo varias charlas con sus familiares para elegir su propio camino.

“Yo lo animé a que tomara la presidencia porque le dije que no era posible que se perdieran 38 años de trabajo que hizo José por el bienestar de los boxeadores. Qué mejor que su hijo, que tiene la misma manera de pensar, siga con esto porque él también tiene muchos proyectos para mejorar el boxeo”, adelanta Marta Saldívar, que destaca a la “honestidad y entrega” como las mejores cualidades que posee su hijo.

Con el evento de ayer, cerraron los últimos homenajes a la memoria de José Sulaimán. Eventos sentidos que tuvieron un epílogo con el nombramiento de otro Sulaimán en la presidencia del Consejo Mundial.