Tras la reunión de la Conmebol con los directivos del River Plate y Boca Juniors, el organismo de futbol sudamericano reveló que la Final de Vuelta de la Copa Libertadores no se jugará en Argentina, debido a los actos de violencia que se suscitaron el sábado pasado.

“Conforme a los hechos de violencia ocurridos en la ciudad de Buenos Aires el 24 de noviembre de 2018, los cuales pusieron en riesgo la seguridad de los jugadores, oficiales y aficionados, incluso con hechos delictuales que las autoridades de la República Argentina se encuentran aún investigando, resulta prudente que el partido FINAL no se juegue en dicho país”, se lee en la nota entregada por el presidente de la Conmebol a los presidentes de los clubes River Plate y Boca Juniors.

Por otra parte, se dio a conocer que el encuentro que definirá al campeón de la Libertadores se realizará entre los días 8 y 9 de diciembre, en un horario y sede a definirse por la administración de la Conmebol.

Asimismo, el organismo sudamericano se hará cargo de los gastos de viaje, hospedaje, alimentación, traslado interno y establecerá las condiciones de seguridad.