Su ideal era darse a conocer en Europa y, por lo pronto, ahora ya es venerado en Córcega. Guillermo Ochoa partió al Viejo Continente para demostrar que tenía calidad, aceptó jugar con el modesto Ajaccio y a sólo seis meses de su llegada al futbol francés ya tiene opción de salir en junio próximo. Alain Orsoni, presidente del club corso, acepta que con la llegada del mexicano, realizó el mejor negocio de su vida y el arquero pudo concretar el anhelo de ser reconocido en el Viejo Continente.

“Hay muchos presidentes que me han dicho que hice el mejor negocio de mi vida, el mejor golpe de la temporada. La transferencia de Memo pasó como algo extraordinario en Francia. El salario que pagamos no corresponde a lo que vale, pero él lo sabe. Fue una apuesta de su parte y un milagro para nosotros”, comparte Orsoni.

El portero del América arriesgó todo su capital futbolístico, luego de que se puso en duda su carrera por el problema de doping tras dar positivo de clembuterol en la Selección Nacional, por ello, perdió otras opciones con clubes más importantes; pero ahora, tras sus actuaciones en Francia, ya es observado por varios conjuntos europeos.

“Honestamente, creo que a final de la temporada habrá muchos clubes que van a buscar a Memo Ochoa. Entre ellos habrá algunos importantes, en este caso hablaré con Memo y si me dice que quiere ese club, pues irá a ese club. Aunque defenderé los intereses del Ajaccio, no haré nada para impedir que se vaya”, confirma Alain, luego de que señala que el mexicano tiene contrato por tres años, pero le dio su palabra de que saldrá cuando llegue una oferta de un equipo que lo seduzca.

“Será muy fácil venderlo, habrá muchos interesados. Al fi n del año a un club interesado le saldrá caro, porque Memo Ochoa no se vende por 100 mil euros. El club, de todas maneras, saldrá beneficiado”, añade el directivo francés en su visita relámpago a México. “Hay algunos clubes interesados ya, pero nada en concreto. Ya preguntan por él en Francia y España”. Orsoni relata que Ochoa llegó gratis al club, luego de que terminó contrato con el América en junio, cuando se concretó el fichaje tras su salida del Tri por positivo de doping. Él confió en su palabra y al final salió recompensado, porque no pagó nada y ahora lo podría vender hasta en seis millones de euros, según la página transfermarkt.de.