Siete jugadores de los San Luis Cardinals y otros seis empleados del equipo han dado positivo por COVID-19, lo que provocó que las Grandes Ligas pospusieran el lunes una serie de cuatro juegos que iban a disputar en Detroit. La serie se iba jugar en el Comerica Park entre el martes y jueves.

“Te quedas pensando lo rápido que algo como esto se propaga”, dijo el gerente de los Cardinals John Mozeliak. “No lo crees hasta que te afecta, pero este es muy real y sabemos que se propaga rápido y silenciosamente, pero puede infectar a mucha gente rápidamente”.

Mozeliak, dijo que cinco de los que dieron positivo no tienen síntomas. Los otros sí: dolores de cabeza, tos, moqueo y fiebre moderada. “De esos ocho, son diversos síntomas, pero nada que requiera una hospitalización”, dijo Mozeliak.

Los Cardinals han estado en cuarentena desde el jueves en sus habitaciones de hotel en Milwaukee, donde su serie del fin de semana fue pospuesta. El equipo se ha sometido a pruebas de diagnóstico todos los días.

“Confíamos poder regresar a San Luis la mañana del miércoles, entrenar por la tarde para que los jugadores puedan soltar las piernas otra vez”, dijo Mozeliak. “Y luego tener otra práctica más robusta el jueves y luego jugar el viernes”.

Su último partido fue el 29 de julio en Minnesota y tentativamente podría retomar el calendario este viernes en casa ante los Chicago Cubs.

Los Cardinals son el segundo equipo de las mayores en verse afectado por un brote del nuevo coronavirus desde que la temporada se puso en marcha el 23 de julio.