En un juego de estrategia al puro estilo italiano, la escuadra del Milan supo llevarse una complicada victoria ante la Juventus de Turín en la novena jornada de la Serie A, para romper la racha de cinco derrotas consecutivas en el clásico del Calcio.

A pesar de las constantes llegadas de la Vechia Signora al marco enemigo, la defensiva de los rossoneri mantuvo su porteria limpia de anotaciones, y con una actuación trascendente del arquero milanés en compañía de una genialidad de Manuel Locatelli, los tres puntos se quedaron en Milán.

Al minuto 36´, una jugada polémica impidió que el marcador se abriera antes de llegar al descanso, luego de un gol anulado que Miralem Pjanic había conseguido con un tiro libre, y después de casi dos minutos de analizar la jugada, los árbitros decidieron invalidar lo que parecía ser un gol legal.

Pero por el sector derecho al 65′, el ansiado invitado llegó al estadio de San Siro, con un potente remate del joven atacante Manuel Locatelli, quien logró colocar un balón inalcazable dentro de las redes protegidas por Gianluigi Buffon, para conseguir el 1-0 en la mejor jugada del partido para los de casa.

A escasos segundos del silbatazo final, el cancerbero Gianluigi Donnarumma se convirtió en el héroe del encuentro al protagonizar una atajada impecable en el ángulo superior de la portería tras un disparo letal de Samy Khedira, en lo que sería la última jugada del partido.

Con este triunfo frente a su eterno rival, los dirigidos por Vincenzo Montella lograron acortar distancias en la liga italiana al colocarse en la segunda posición, con sólo dos unidades por debajo del conjunto de la Juve y a la espera de lo que haga la Roma, este domingo, en contra del Palermo.