Barcelona selló el pase a los cuartos de final de la Copa del Rey tras golear con comodidad al Leganés en el Camp Nou (5-0), donde el proyecto de Quique Setién recobró la verticalidad y tomó aire después de la derrota liguera contra el Valencia.

El equipo azulgrana, más incisivo en ataque, sentenció al equipo ‘pepinero’ con los goles de Clément Lenglet y Antoine Griezmann, en el primer tiempo, y Lionel Messi, por partido doble, y Arthur Melo, tras el descanso.

Cambió el libreto Setien y, de una línea defensiva de tres jugadores, recuperó el 4-3-3 más clásico. Se notó en el césped. Messi, con libertad por la derecha, Griezmann, de ‘nueve’, y Ansu Fati, desequilibrando por la izquierda, dieron a su equipo la profundidad que faltó en los primeros tres encuentros del técnico cántabro en el banquillo azulgrana.

EFE

Messi registró este jueves su victoria número 500 en partidos oficiales con el Barça. Para alcanzar esta cifra, Messi necesitó 710 partidos, en los que sufrió 131 empates y 79 derrotas, anotó un total de 622 goles, una media de 0,87 tantos por partido, y ganó 34 títulos.