Criticado por siempre hacerse pequeño en la Postemporada, este domingo por fin apareció la versión ganadora de Lamar Jackson, quien logró su primera victoria en los Playoffs de la NFL para que los Baltimore Ravens consumaran la venganza ante los Tennessee Titans, que los eliminaron el año pasado.

Juego terrestre y defensiva eran las claves para este partido para cualquiera de las dos franquicias, ya que en ello basaron gran parte de su éxito en la temporada regular. Sin duda, la clave fue que la defensa de Baltimore contuvo a Derrick Henry, el corredor que rebasó las 2 mil yardas en la fase regular, pero este día apenas sumó 40.

Y mientras el monstruo terrestre de Tennessee decepcionó, Lamar Jackson sumó 136 yardas corriendo y una anotación por esa vía, siendo el líder de los Ravens con una espectacular escapada de 48 yardas que culminó en las diagonales para el empate 10-10 con el que se fueron al medio tiempo.

JK Dobbins -también por tierra- marcó el otro touchdown de Baltimore al inicio del tercer cuarto y con eso fue suficiente, la defensiva hizo un enorme trabajo contra Henry, Ryan Tannehill y AJ Brown, que tras llegar a la Final de la Conferencia Americana en 2020 ahora se despiden a las primeras de cambio de los Playoffs.

Lamar Jackson rompió su maldición

En sus dos presentaciones previas en Postemporada, Lamar Jackson tenía récord de 0-2, lo que le había generado una reputación de ser “un quarterback corredor, pero no ganador”, recordando que él fue el Jugador Más Valioso de la NFL la temporada pasada y ahora tiene a los Ravens con seis victorias consecutivas, esperando quiénes serán sus rivales en la Ronda Divisional el próximo fin de semana.