El despido de Thomas Tuchel del PSG fue “un shock”; sin embargo, era inevitable, según revela el ayudante del entrenador alemán, Zsolt Low, en declaraciones que dio al medio húngaro Nemzeti Sport. “Seamos honestos, la situación no habría sido sostenible a largo plazo”, explicó Low en una entrevista publicada el sábado. “No hubiera seguido aunque me lo hubieran ofrecido.

No entraba en mi cabeza no seguir a Thomas”. “Era mejor decirse adiós ahora, estando cerca de la cima, con muchos bonitos recuerdos”, estimó. “Estos dos años y medio fueron bellos”.

El cese “nos llegó por sorpresa, el 23 de diciembre, tras una victoria por 4-0 contra Estrasburgo, cuando (el director deportivo) Leonardo nos llamó para decirnos que ya no necesitaba a Thomas de cara al futuro”, recordó el adjunto, añadiendo: “incluso si lo veíamos venir, el anuncio de Leonardo fue un shock”.

“Tras haber hecho frente a considerables dificultades en 2020, pensamos que esta decisión era un poco incomprensible”, añadió. Entre estas dificultades, Zsolt habla de “las innumerables lesiones que debilitaron la plantilla” y estima que fue “un gran éxito profesional terminar el año así”, primero de su grupo de Liga de Campeones y a un punto del líder Lyon en Ligue 1.

Relación Tuchel-Leonardo había llegado a su final

Todo el mundo “sabía que había tensiones entre el director deportivo y el entrenador principal estos últimos meses. Dicho de otra manera, el anuncio no fue un rayo en un cielo sin nubes”, comentó Low.

El adjunto no quiere “entrar en detalles” y resumió: Leonardo y Tuchel “tenían diferentes principios de gobernanza” e “ideas diferentes en muchos aspectos, que se incrementaron con el tiempo”.

“Eso condujo a Leonardo a plantearse el futuro con otro equipo técnico”, concluyó, en este caso con el argentino Mauricio Pochettino, cuya llegada fue oficializada el sábado y que debía dirigir el domingo su primer entrenamiento.