Al término de su investigación, las Grandes Ligas de beisbol (MLB) anunciaron el viernes que no sancionarán a la figura de los Dodgers Justin Turner por festejar con sus compañeros el título de Serie Mundial pese a dar positivo en una prueba de coronavirus. Tanto la MLB como el propio Turner emitieron sendos comunicados el viernes, con el pelotero de los Dodgers emitiendo una disculpa por “no apreciar los riesgos de regresar a la cancha” una vez que fue informado del resultado de su examen. El pasado 27 de octubre, en el sexto y definitivo juego de la Serie Mundial entre los Dodgers y los Rays de Tampa Bay, Turner fue retirado abruptamente del partido en la octava entrada tras conocerse su positivo.

Al tercera base se le pidió que se aislara inmediatamente pero, terminado el juego, se unió a las celebraciones del primer título de la franquicia angelina desde 1988. Turner, de 35 años, volvió al campo del Globe Life Field de Arlington (Texas) acompañado por su esposa portando ambos mascarilla aunque posteriormente se las retiraron para las fotografías. Horas después, las Grandes Ligas emitieron un duro comunicado en el que acusaban a Turner de negarse “enfáticamente” a cumplir los protocolos y de poner en riesgo a otras personas, anunciando la apertura de una investigación.

Rob Manfred afirma que fue un ‘malentendido’

Sin embargo, el comisionado de MLB, Rob Manfred, dijo este viernes que no se tomarán medidas contra Turner, señalando varios atenuantes como que sus compañeros le “animaron activamente” a volver al césped para fotografiarse con el trofeo. Turner también dijo creer que un empleado no identificado de los Dodgers le había dado permiso para regresar, aunque el comisionado afirmó que pudo haber sido “un malentendido”.