Santiago Romero, jugador del Nacional de Uruguay, sufrió una lesión muy absurda durante el juego contra el Liverpool, ya que durante el festejo de un gol, uno de sus compañeros le rompió la nariz al estilo karateca.

Después de que Brian Lozano marcara un gol de tiro libre, los jugadores corrieron a festejar con él, pero en medio de la euforia Diego Polenta, capitán del equipo, saltó y lanzó una patada que fue a dar directo a la cara de Romero.

El golpe que recibió Santiago le provocó una fractura en el tabique nasal, por lo que fue ingresado al quirófano para ser operado.