El Copenhague liquidó 4-0 al Brujas en una notable segunda parte, en la que consiguió los cuatro tantos y perdonó alguno más, para lograr una victoria que le permite empatar a puntos con el Leicester en el liderato del Grupo G.

Al arranque del partido le costó al Copenhague encontrar huecos frente a un ordenado Brujas, obligado a mejorar su imagen tras salir goleado de su campo en el primer partido contra los Foxes (0-3).

De ahí que abusara de los balones por arriba y los centros, aprovechando la superioridad física del paraguayo Santander y de Cornelius, que a punto estuvo de adelantar a su equipo con un cabezazo que salvó Poulain bajo palos.

El campeón danés subió su nivel en la segunda parte y se llevó por delante a un Brujas que se desinfló al primer contratiempo.

Los belgas se hicieron el primer gol de forma cómica. Sin nadie que lo presionara, el central Denswill metió en su portería un centro de Ankersen.

Augustinsson erró un penalti forzado por Santander, que se llevó una patada en la cabeza cuando quiso cabecear un centro.

Pero el Copenhague estaba lanzado y en cinco minutos cerró el encuentro. Primero, con una volea a la ángulo de la portería por parte de Delaney; luego, con un remate de Santander, que fusiló dentro del área a Butelle.

Falk, Cornelius y Toutouh pudieron ampliar aún más el marcador, pero fue Jørgensen el que cerró la goleada en el descuento, devolviéndole al Brujas el 0-4 de hace unos años en la Liga Europa y afianzando las opciones de un Copenhague que mira hacia arriba.