Luego de las polémicas declaraciones de Gisele Bündchen, esposa de Tom Brady, sobre una posible conmoción que sufrió el quarterback de los Patriots durante 2016, el pasador habló por primera vez y, simplemente, se no quiso meterse en problemas.

“Me voy a la cama con ella (Gisele) todos los días. Ella sabe cuándo estoy lastimado, cuándo estoy cansado, cuándo estoy golpeado. Pero también sabe cómo y cuánto me cuido. Es una esposa que se preocupa y me quiere mucho”, declaró Brady a la cadena ESPN.

Con dicha afirmación, el cinco veces ganador del Super Bowl sólo dejó más dudas, ya que no quiso desmentir a su esposa, aunque tampoco dejó claro si ella tenía la razón.

En su momento, lo dicho por la modelo brasileña generó mucha polémica, ya que la NFL no tiene registro de que Tom Brady haya sufrido una conmoción cerebral a lo largo de su carrera en la Liga.

“Tuvo una conmoción cerebral el año pasado. Realmente no creo que sea una cosa sana para el cuerpo del pasar por ese tipo de agresión todo el tiempo. Eso nunca podría ser saludable”, dijo Bündchen en mayo del presente año, a la cadena estadounidense CBS.

El tema de las conmociones es muy sensible para la NFL, ya que en tiempos recientes, muchos jugadores han denunciado tener problemas de memoria años después de jugar futbol americano por los golpes que recibieron en la cabeza, durante su paso por la Liga.