Andy Murray ha dado positivo a covid-19, motivo que pondría en peligro su regreso a las competencias, en especial al primer Grand Slam del 2021 en el Abierto de Australia.

El exnúmero 1 del mundo quedaría excluido de la competencia debido al protocolo de sanidad de aquel país, el cual pide  que jugadores y árbitros lleguen a Australia durante una ventana de 36 horas a partir del jueves y deberán cumplir un aislamiento obligatorio de 14 días.

Los jugadores podrán pasar cinco horas fuera de sus habitaciones durante la cuarentena para entrenarse, jugarán después partidos de calentamiento en Melbourne Park desde el 31 de enero, antes de que comience el Abierto de Australia el 8 de febrero.

Murray se retiró de las canchas a principios de 2019 debido a una cirugía de cadera, pero nueve meses después regresó y ganó el título en Amberes. Su actividad en 2020 fue casi nula y el inicio de 2021 parece no ir por buen camino.