Una vez más, la marea carmesí amenaza con coronarse en la NCAA. Alabama calificó a la gran final del College Football por quinta vez en los últimos seis años después de eliminar en las semifinales sin complicaciones 31-14 a Notre Dame en un atípico Rose Bowl que se jugó por segunda ocasión en su historia fuera de Pasadena, California.

El AT&T Stadium, casa de los Vaqueros, fue el recinto que vio a la dupla de Mac Jones y DeVonta Smith destrozar a unos ‘irlandeses peleadores’ que demostraron aún estar lejos de las potencias colegiales. Ambos candidatos al Trofeo Heisman se conectaron en tres touchdowns.

Desde que salió al campo, el equipo de Nick Saban movió el balón con facilidad. Después de avanzar 78 yardas en siete jugadas, DeVonta consiguió su primera anotación. Jahleel Billingsley aumentó la ventaja pocos minutos más tarde. Contra el número uno de la nación ponerte abajo en el primer cuarto por dos posesiones ya luce como una desventaja imposible de remontar y la losa fue demasiado pesada para los dirigidos por Brian Kelly.

Una esperanza surgió cuando, en su primer gran avance, Notre Dame logró recortar distancias a través de un acarreo de Kyren Williams; sin embargo, fue el único daño que lograron en el duelo y su defensiva continuó sin respuesta para el Crimson Tide. Ya se veía venir una paliza.

Las mejores jugadas de ND llegaron más por el coraje de su quarterback Ian Book que por buenos llamados. Cuando empezó a doblarse su línea ofensiva y tuvo que salir corriendo varias ocasiones se lesionó. El novato Drew Pyne poco pudo contribuir durante su única serie. El quarterback titular regresó, pero nada consiguió ante una defensa plagada de talento NFL, entre los más destacados, Patrick Surtain II, un esquinero que pinta para ser uno de los primeros seleccionados.

Saban comenzó a darle rotación a sus piezas para evitar lesiones de cara a la final del próximo 11 de enero. Notre Dame logró llevar el ovoide una vez más hasta territorio profundo de Alabama con algo de tiempo, pero allí el campeón de la Conferencia SEC se aplicó y evitó que revivieran las aspiraciones en su rival. El resto fue acabarse el tiempo del reloj. En los instantes finales, ya con todo finiquitado, Book puso el marcador más decente.

Smith burló una y otra vez al perímetro de su rival. Al final terminó con siete recepciones para 130 yardas y un touchdown, mientras que Jones lanzó para 303 yardas y cuatro envíos a las diagonales. Najee Harris contribuyó por tierra con 125 yardas en apenas 15 acarreos. El Crimson Tide continúa con su tradición de competir año con año por el título colegial.